El alma del hierro
A lo largo de la visita se comenta con los alumnos cómo, en manos de Julio González, el hierro se metamorfosea y cobra vida, materializando la intensidad de las emociones humanas y provocando a su vez emoción en el espectador. Asimismo, se incide en los hallazgos formales de Julio González y en su creación de un nuevo concepto de escultura que parte del ensamblaje de piezas metálicas para construir las formas y estructuras escultóricas. La combinación de materia y vacío, y el "dibujo en el espacio", son algunas de las innovaciones formales que resultan de este tipo de investigación con el material.
La exposición, organizada cronológicamente, recorre la trayectoria de Julio González desde sus años de formación en Barcelona hasta la configuración de su lenguaje escultórico de madurez. La visita comentada se detiene especialmente en las obras de los años treinta, en las que el escultor lleva a cabo sus aportaciones más relevantes.
El taller posterior propone a los alumnos un proceso de trabajo en torno a las emociones y a los medios para expresarlas materialmente. Tomando la emoción como punto de partida, se desarrolla un trabajo plástico en varias etapas: concepción de la idea, bocetos y realización material.