Escultura
A comienzos del siglo XX surge un nuevo lenguaje escultórico compuesto de tradición y rupturas, libre de convenciones, reflejo del acelerado desarrollo tecnológico que experimenta la sociedad. Un lenguaje artístico interesado en utilizar el espacio vacío, descubrir el movimiento o detener el tiempo.
Cada sesión de Taller de Escultura consta de tres partes. En primer lugar, los niños descubren directamente las esculturas en los espacios del Museo. Acompañados por los educadores, se sumergen en una visita comentada que desgrana los contenidos de cada pieza in situ. Posteriormente llega el momento para la representación en el Teatro de Títeres, donde las obras contempladas en las salas se convierten en títeres. Finalmente, los alumnos construyen su propia escultura: una composición con diferentes piezas de cartón, a la que pueden dotar de color y llevarse a casa.