Si fuera un movimiento
El itinerario propuesto durante el curso 2011-2012 se desarrolla en la Planta 4 del Museo e incluye obras de Eduardo Chillida, Adolph Gottlieb, Clyfford Still, Equipo 57 y Joan Miró. Ante las obras, el planteamiento que propone Si fuera un movimiento consiste en reducir al mínimo el papel de la transmisión o el diálogo verbal, y sustituirlo por formas de percepción en las que prima la activación simultánea de distintos sentidos. Este trabajo, ejecutado por una bailarina y un instrumentista, pone el énfasis en un acceso al conocimiento de tipo intuitivo, que se considera idóneo para alumnos que cursan la primera etapa de la Educación Primaria.
El objetivo es que los alumnos aprehendan la configuración formal y el contenido de las obras seleccionadas a través de su propia corporeidad, intentando romper el habitual estatismo del espectador y la relación exclusivamente visual con la obra de arte. Al mismo tiempo, se intenta provocar en ellos un cambio de actitud hacia el arte y hacia el propio museo.