Man, Machine & Motion (Hombre, máquina y movimiento)
Richard Hamilton
- Fecha:1955 / Reconstrucción de 2012
- Técnica:Instalación e impresión fotográfica
- Técnica descriptiva:Obra formada por 176 fotografías en blanco y negro impresas sobre 54 paneles de dibond en una estructura de acero. Ilustra la conquista mecánica del tiempo y la distancia por parte de las estructuras creadas por el hombre
- Dimensiones:Dimensiones variables
- Categoría: Instalación
- Año de ingreso:2014
- Nº de registro:AD06999
En 1955, cuando Hamilton era profesor en la Universidad de Newcastle-upon-Tyne, entonces Universidad de Durham, se planteó el proyecto de Man, Machine and Motion (Hombre, máquina y movimiento) como una exposición que representara «un estudio visual de la relación del hombre con las máquinas de movimiento» con el título inicial de Human Motion in Relation to Adaptive Appliances (Movimiento humano en relación con sus aplicación). La obra fue finalmente montada en mayo de 1955 en la Hatton Gallery de Newcastle, y dos meses más tarde en el ICA (Institute of Contemporary Art) de Londres. La instalación conectaba con algunas de sus pinturas de los años cincuenta dedicadas al tema del movimiento en las fotografías de Muybridge, el Cubismo, el Futurismo o las obras dadaístas de Duchamp, pero sobre todo tenía en cuenta el universo del cine, las gestas deportivas y su interés y experiencia en el diseño de máquinas que compartió con el crítico de arquitectura Peter Reyner-Banham, colaborador en el catálogo de Man, Machine and Motion. La obra del Museo se corresponde con la instalación producida por el New Museum de Nueva York para la exposición Ghost in the Machine en 2012. Está formada por 176 fotografías sobre 54 paneles de Dibond en una estructura de acero, dividida en cuatro secciones: acuática, terrestre, aérea e interplanetaria. Según la nota de prensa que Hamilton redactó en 1955, su propósito fue ilustrar «la conquista mecánica del tiempo y de la distancia [por medio de] las estructuras que el hombre ha creado para ampliar su capacidad de locomoción y para explorar regiones de la Naturaleza que antes le eran negadas». El artista trabajó a partir de fotografías y dibujos fotografiados recolectados en la Biblioteca del King’s College, que abarcaban un largo periodo de la historia, pero dio prioridad a las imágenes fotográficas que eran coetáneas al nacimiento del transporte mecanizado. El interés específico del artista está en que no solo apareciera la máquina en movimiento, sino también la presencia del hombre, para así referir aspectos como el estatus social y la sexualidad que van asociados a estas máquinas.
Carmen Fernández Aparicio