Vivimos en la era de la velocidad y el rendimiento. Frente a esta concepción acelerada del tiempo, que solo atiende a la efectividad, el ciclo de cortometrajes de animación ¡El tiempo es todo nuestro! incide en la lentitud y el tiempo libre como reivindicación necesaria. A lo largo de cuatro programas de alrededor de 50 minutos de duración, se abre una reflexión sobre el ocio y la manera en la que lo llenamos y ocupamos.