“A. es una persona y la primera letra del alfabeto. Puede ser una persona universal o de mi imaginación”. Jana Leo (Madrid, 1965) describe de este modo al protagonista de esta exposición en Espacio Uno, a quien hacen referencia en una primera lectura todos los materiales visuales reunidos.
Jana Leo revela (o desvela) su vida con A, a través de numerosas imágenes en color y de variados tamaños, así como de vídeos, libros compuestos con fotografías a la manera de álbumes y diversos textos.
Por su presencia ausente y su mirada tras la cámara, la artista asume finalmente tanto protagonismo como el personaje masculino. Ella es la causa y la destinataria de la sonrisa de A. Ella también revuelve las sábanas blancas de la cama y sobre todo, es quien delata sus aspectos más íntimos, como dormir, ducharse o incluso evacuar.
Mediante estas imágenes, Jana Leo pone de manifiesto la pulsión de control sobre el otro que pueden desencadenar las relaciones personales. Al tiempo, el uso de los motivos repetidos, como la cama o los osos de peluche, logra dotar de cierto aire de serie al conjunto. Además, constata lo fácil que resulta captar cualquiera o todos los instantes de la vida.
Sin embargo, una segunda lectura más detenida de las fotografías, los libros y los vídeos en súper-8 (Corte de pelo, Sin nombre, Limpiar el baño, Histérica y Polvo, realizados entre 1996 y 1999) permite descubrir que existe una obsesión mayor en este diario visual de A. Se trata de la pulsión de dejar rastro, de modo que la identidad de Jana Leo se construye a partir de la huella e impronta que deja en la vida de la pareja.
El amor, la muerte, la violencia, la ternura y el tiempo compartido son los temas de todas las obras, desplegadas por el espacio expositivo. Jana Leo no persigue una voluntad estética y, pese a la apariencia de naturalidad en las fotografías, la artista es consciente del acto de posar y de la presencia de la cámara como condicionante del comportamiento. De este modo, la pose constituye una primera construcción, y la búsqueda de la representación de la ausencia de la artista (a través de la presencia de A.) supone la segunda.
En este sentido, el proyecto A. se erige en una propuesta en la que conviven realidad y farsa. Para ello, Jana Leo aprovecha las difusas fronteras entre lo privado y lo público, al hacer visible la intimidad cotidiana y la espectacularización de los sentimientos.
Datos de la exposición
Obras de la Colección incluidas en la exposición
Publicaciones del Museo Reina Sofía
