Sam Francis. Pinturas 1947-1990

6 junio - 14 agosto, 2000 /
Edificio Sabatini, Planta 1
Vista de sala de la exposición. Sam Francis. Pinturas 1947-1990, 2000
Vista de sala de la exposición. Sam Francis. Pinturas 1947-1990, 2000

Sam Francis (San Mateo, EE.UU., 1923 – Santa Mónica, EE.UU., 1994) contribuyó de manera muy significativa al reconocimiento internacional de la nueva pintura estadounidense de los años cincuenta. Durante cuatro décadas su presencia en Europa y Asia, así como en su país natal, daría testimonio de la vitalidad ininterrumpida del arte americano. La influencia en su pintura de la abstracción propia de la Bay Area de San Francisco, encabezada por Mark Rothko y Clyfford Still, se sumó a la gran tradición francesa del color ejemplificada por Claude Monet, Paul Cézanne, Henri Matisse y Pierre Bonnard que conoció al trasladarse a París en 1950. Aunque en un primer momento se le relacionara con la Escuela de Nueva York, el arte de Francis nunca poseyó las marcas gestuales ni la crudeza de Jackson Pollock o Willem de Kooning, a pesar del respeto que les profesaba como artistas.

Esta exposición de las pinturas de 1947 a 1990 de Sam Francis en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía se compone de sesenta y cinco pinturas y veinticinco dibujos. Ordenada siguiendo un criterio cronológico, la muestra se abre con California Grey Coast (1947), un pequeño gouache casi monocromo que representa el perfil de la costa norte de California. Esta es la primera de las vistas aéreas que aparecerán con frecuencia en el arte de Francis, nada extraño teniendo en cuenta su experiencia como piloto.

Francis fue muy dado desde el principio a trabajar sobre papel y siempre concedió el mismo valor a sus papeles que a sus telas. A menudo sus ideas nuevas surgían con anterioridad de un año o más sobre el papel que sobre los lienzos.

Conocido por su cromatismo, sus logros con el color comenzaron pronto aunque utilizando una gama mucho más oscura que por los tonos encendidos por los que se le reconocería a partir de 1952. El negro y sus escalas serán parte importante de su pintura desde 1950.

Las pinturas en blanco y gris presentes en la exposición fueron las primeras que le dieron fama al ser expuestas en la Galerie du Dragon de París en 1952. Se puede ver también durante el recorrido por la muestra la que probablemente es su obra más conocida Rojo grande (Big Red), 1953, adquirida por el Museum of Modern Art e incluida en la exposición de 1956 Twelve Americans, dedicada a artistas que comenzaban a destacar. Esta muestra y un artículo de la revista Time que le calificaba como el pintor joven más cotizado de París aseguraron su fama a nivel internacional.

En Abstracción (Abstraction, (1954) y Naranja grande (Big Orange) (1954-55) se observa cómo sus formas se hacen mayores, más claras y cada vez más brillantes, con una tendencia que caracterizaría su producción durante los quince años siguientes. El azul entró en su pintura a raíz de su encuentro con las Nymphéas de Monet, un color con el que trabajará reiteradamente una vez abandonado París. En la exposición se encuentran algunos ejemplos de la serie Pelotas azules (Blue Balls), consecuencia de la falta de salud recurrente que persiguió a Francis durante toda su vida, así como las pruebas de su destreza con la pintura mural en los encargos para la Kunsthalle de Basilea, Tokio o Berlín.

“El centro está reservado para vosotros” es la declaración de Francis respecto a su pintura que revela la mayor clave interpretativa de su obra. Incluso en sus pinturas de 1973-74 donde practica un enrejado evidente, el centro sigue quedando despejado. La influencia que produjo en el pintor californiano el análisis junguiano forma parte igualmente de su pintura de los setenta. El estallido de color, de gran intensidad emocional y destreza técnica, caracterizará su obra en los ochenta y le acompañará hasta el final de sus días. Diezmado por la enfermedad, Sam Francis no cesará en su intento de captar con el color la fuerza vital que le llevará a trabajar hasta el último momento, produciendo una última serie de ciento cincuenta y dos pequeñas pinturas y evidenciando con ello la voluntad irrefrenable que anima a los grandes pintores.

Datos de la exposición

Organización: 
The Museum of Contemporary Art, Los Angeles, en colaboración con el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Comisariado: 
William C. Agee
Itinerario: 

Museo de Arte Contemporáneo, Los Ángeles (7 marzo - 25 julio, 1999); The Menil Collection, Houston (10 septiembre - 2 enero, 1999-00); Malmö Konsthall, Malmö, Suecia (29 enero - 1 mayo, 2000); Galleria Comunale d'Arte Moderna e Contemporanea, Roma (30 octubre - 28 enero, 2000-01)

Artistas: